Nacer ...

Tiene una maravillosa imagen pero no me permite publicarla el blog...

Pasan los días, terminan los años, la pregunta mantiene su vigencia:

Al nacer, ¿somos todos iguales?

 No importa donde ocurre nuestra aparición, no importa la identidad de nuestros padres, no importa si es en una casa, o en un rancho, o en un palacio, no importa si es de noche o de día, verano o invierno, ¿todo da igual?

 Nuestro carácter pertenece a los genes, ¿como nuestro color de piel, de ojos?

Todos nacemos buenos, humildes, tranquilos, ¿nada perturba nuestra presentación?

 El medio ambiente que nos rodea influye en nuestra personalidad futura, ¿es capaz de modelarnos, inclusive en contra de lo adquirido en el comienzo?

 Ya se dijo: ""llegamos sin pedirlo""

 No obstante, recibimos y soportamos, amenazas, quejas y culpabilidad, ante actos propios de nuestro errores.

 Somos culpables ya antes de nacer. Y sin embargo, continuámos llegando a este mundo.

Beto Brom

escritor - Galilea- Israel

Shalom

Buenas noches mi querido Javer

En el acto de nacer todos nacemos iguales lo cierto es que por ello no significa que todos nacemos en las mismas condiciones hay muchos complementos circunstanciales que acompañan al acto en sí  y todos están cubiertos con distintas tonalidades…

Algunos más de lo que uno cree o piensa, alcanza a ver o puede percibir es que  apenas pueden sobrevivir en el mejor de los casos unos Instantes, otros no se han dado ni por enterados y pasan por la vida sin haberla encontrado sentido…

Soy de la que piensan que nada tiene que ver si ha sido deseado o no, si es amado o no, si nació en la jungla o en pleno corazón de Palermo Soho, es mucho más fina y profunda  la línea del nacer… UNO debe aprender a no condicionarse para ello esta el ejercicio pleno del acto del libre albedrío

Mi mirada hasta ahora me señala e  indica que existen algunos que se quedan solo con la  noción de lo que significa y se llenan la boca con un montón de palabras huecas...  Otros, mucho menos aún, son los que se esfuerzan,  preparan y trabajan con una real conciencia de haber tenido la gracia de haber nacido…

Uno -es lo que siempre toy aprendiendo- reflexiona antes de actuar y se llama al deber de ser consciente, en aprender que en esta trayectoria del nacer lo importante no son las causas sino las consecuencias, lo que cada uno de nosotros hace con lo que ocurre, con lo que nos atraviesa a uno y al otro también… por eso podemos conjugar responsablemente  - el nosotros- …  Uno es el que decide y elige estancarse en el fracaso, en la pérdida, en la falta, en una discusión o en un error propio o ajeno.

Uno siempre puede también optar por no quedarse en el dolor y sí,  en el  deber de ser consciente, en aprender a resignificarlo…  y , es esta una elección que sí depende de cada uno y de nadie más!

El salir adelante, luchar por la propia vida y la del otro... ser solidario,  tener el coraje de tomar las propias riendas y hacerse cargo del  diario vivir a conciencia plena  tratando de  superarse y  estar lo suficientemente lúcido sabiendo que  el pensamiento es el mejor camino ante el actuar impulsivo de la gran  máquina humana...

Oh! me fascina el tema Beto da para mucho pero mucho más! Ya lo creo que sí, así que te pido disculpas si me extendí mucho. Hasta aquí te he dado la palabra de mi pensamiento, de mi sentir y mi hacer... que es lo único que poseo  y es,  tan sólo  mi mirada ... lo que lejos significa que sea o puede ser la de otros...

Abrazo fuerte, fuerte Manelita

Me olvidé de decirte que soy de las que piensan que desde el mismo Instante que nací también me estoy muriendo... Así que siempre toy dando la bienvenida y despidiendome... siempre es la primera y última vez así que todo lo siento, lo pienso y lo vivo plenamente...

Salir de los lugares cómodos y conocidos es siempre un desafío ... es el gusto de honrar mi vida, a quien me dio la vida ... a mis hijos y a mis amigos !  Manelita

 Tu forma de ver las cosas, Manelita, tu visión del mundo y tus concepciones, no obstante no son nuevas para mi, pero tu comentario me ayudó a recordarlas y confirmar mi admiración y cariño hacia ti, amigaza del alma. Neshicot mil
tu javerico