Diosa Mané

Diosa Mané
Mané Castro Videla - Mujer Poeta y Artista Plástica Argentina - Española

domingo, 31 de diciembre de 2017

Hago votos por un 2018 colmado de poesía... De ti y de mi... De un nosotros, enredándonos en eterno amor!



Siempre hay algo profundamente íntimo en la escritura. 
Es ese algo, único, inconsciente, que nos marca y nos brinda identidad. 
A construir palabra, sentidos, deseos, identidades, cuerpos, voces... 
A nombrar un más allá , eso que nos hace quienes somos,
quienes nos vamos construyendo...
Giremos sobre nosotros, a un regreso infinito...
A ese poema de amor, donde tu y yo, eramos el poema sin papel. 
Solo tu y yo, recreándonos otra vez en el vínculo, 
creando algo nuevo en las huellas profundas y el amor, 
nos pone a andar uno frente a otro y nos une,
 revueltos, separados, desnudos! 

Hago votos por un 2018 colmado de poesía...
De ti y de mi... 
De un nosotros, enredándonos en eterno amor! 

Mané Castro Videla


domingo, 24 de diciembre de 2017

El amor acrisola al amor


Si no quieres sufrir, renuncia a amar, esa es la prueba más convincente que amamos.
El amor acrisola al amor.
Y uno sola, sufre, ama y vive, es inseparable estas tres realidades, sin importar su orden.
Aprendí a amar, a fuego, a amar incondicionalmente a cada uno de mis hijos.
Ni el vivir ni el sufrimiento y el vivir tiene otro sentido.
Es ser más allá de ellos, es recobrar las fuerzas.
Es ser el repicar de la campana, el corazón latiendo.
Es sentir los cielos, el milagro y el lucero.
Es ser el aliento dando vida, creciendo en nuestro ser al niño Dios en el alma.
Es dar a luz al hijo y ser la madre.
Y ser la realidad de la promesa ofreciendo con y por amor, el corazón solo inclinada a Dios.



Manè Castro Videla
Hija, Mujer, Madre y Amante de Dios




domingo, 17 de diciembre de 2017

Declinando -La extraña Dama-




Declinamos
de toda responsabilidad
sobre las opinones vertidas
Reza un viejo adagio en el espejo

Ella y su angustia.
Ella y su dolor.
Ella atravesada
por el designio culposo y la melancolía.
Ella, la de siempre, la de todos los días
tomando cuerpo, dilatando el tiempo,
potenciando la escena, la falta,
la pérdida, la finitud y la castración,
la angustia del todo o la nada,
ella, declinando.
Se recordó pariendo en soledad, 
dando vida a su existencia.
LLena de recuerdos
remarcó una a una cada letra
y toda la palabra, declinamos.
Remarcó... deseo, legado y mandato.
Mochila de plomo.
Opiniones vertidas.
Ella, se reconoció en el deber de siempre,
estar haciendo algo.
De ser el permanente andar.
De ser el motor y el análisis 
para encontrar la salida.
De ser solo ella, solo ella y en soledad,
transitando los bordes.
Vivenciando, lo que hay. El amor.
En ser siendo ella, en el ser de la búsqueda
más que la espera.
En ser siendo ella, en el ser tan solo, una respuesta.
Tan solo, la palabra.
La palabra que arranque la angustia, su certeza.

Manè Castro Videla
La extraña Dama





domingo, 10 de diciembre de 2017

Yo quería



Yo quería...
Quería querer y que me quieran.
Mi corazón estaba lleno de amor y el tuyo, esta lleno de odios, suspicacias, 

rencores, envidias, venganzas.
Yo quería pero la ceguera y ceguedad de tus instintos ciegos, 

el conflicto de la mente y el corazón fue más fuerte, me excluiste, sin piedad!
Fui excluida en la mirada egoísta y ruin, de la mirada falsa de la vida.

Yo quería...  Mané




domingo, 3 de diciembre de 2017

Confundida





Confundida, creyéndose burlada
en su corazón encendido
comenzó a desnudar la soledad sin llorar.
Sin negar que le hicieron tanto daño,
la maledicencia, la envidia y la torpeza
hasta llevar a la muerte, a la inocencia.
Echándola herida al fuego eterno,
al estallido del ser.
A esa pérdida de lágrimas,
de su esencia nunca jamás consumada,
de ese saberse ser la belleza de la vida
del placer de lo femenino
cuando se trata de amor.
Te llevaste el corazón y los sueños,
el entregarse a fondo en los cielos
el erotismo de los cuerpos,
a la luz de los besos.
Te llevaste contigo mi vida de niña,
me dejaste el silencio
con el corazón en pedazos
juntándome los trozos
entre las sombras de las olas.
Me resisto a morir,
aún me quedan, las letras de arena
clavadas en la piel de la luna de plata
recitando a el amor loco,
a el amor cortés.
Embriagando
los recuerdos del alma
entre los ojos delineados
y las letras
cruzando la bahía en la mañana.


Manè Castro Videla